El Capitán Contreras dejó un testimonio que sirvió de inspiración a Pérez Reverte en su "Capitán Alatriste". Sin embargo el Capitán Contreras no es un personaje literario y lo increíble es que lo que cuenta es verdad. Así eran los españoles que desde el Mediterráneo a Filipinas, desde América a Flandes construyeron un imperio. Alonso de Contreras no nos ha dejado un elogio de sí mismo, sino un relato descarnado de un estilo de vida que él describió con una escueta frase: "Reputación busco, que no dinero". Su biografía también nos dice que, si aquel imperio terminó derrotado ante sus múltiples enemigos, la culpa no la tuvo el soldado de a pie, que puso todo de si mismo para cumplir con su deber. Nació en Madrid el año 1582 en el seno de una modesta familia, siendo rey Felipe II, y muere en 1641, en tiempos de Felipe IV. Con apenas 13 años tiene que cumplir una pena de destierro por haber matado a un compañero de estudios con un cuchillo. Aunque encontró trabajo como platero después de cumplida la pena, se alistó en los Tercios de Flandes, bajo el mando del Archiduque Alberto de Austria, en 1597. Debido a un malentendido con sus superiores se dirige a Italia. En Palermo se enrola en la armada de Pedro de Toledo, la cual tenía una actividad muy intensa por causa de los piratas turcos y berberiscos. En 1601 se le pone al mando de una fragata, con la que recorre el mar Egeo. En 1603 alcanza el grado de alférez de infantería. Se casó con un española viuda, a la que acabó matando tras sorprenderla en la cama con uno de sus amigos. Más adelante intentó ser ermitaño, retirado en el Moncayo, pero tuvo que abandonar esta vocación al ser acusado de encabezar un levantamiento morisco. Una vez absuelto, fue de nuevo a Flandes y de ahí otra vez al mar Mediterráneo. Durante este cambio de destino militar, se le tomó por espía y acabó en prisión. Aclarado todo, volvió a tomar el mando de un navío, tras haber ingresado en la Orden de Malta. Formó parte de una expedición en el Caribe y combatió contra sir Walter Raleigh, conocido por Guatarral. Posteriormente es nombrado gobernador de El Águila, en la actual región de los Abruzos, al nordeste de Roma. En 1630 se retiró del servicio y obtuvo el título de Caballero Comendador de la Orden de Malta. Es posible que escribiese estas memorias siguiendo el consejo de su amigo Lope de Vega.