T. S. Eliot una vez llamó a Jacques Maritain "la figura más conspicua y probablemente la fuerza más poderosa en la filosofía contemporánea". Su esposa y devota compañera intelectual, Raissa Maritain, era de ascendencia judía pero se unió a la iglesia católica con él en 1906. Maritain estudió bajo Henri Bergson pero quedó insatisfecho con la filosofía de su maestro, encontrando eventualmente certeza en el sistema de Santo Tomás de Aquino. Impartió conferencias ampliamente en Europa y en América del Norte y del Sur, vivió y enseñó en Nueva York durante la Segunda Guerra Mundial. Nombrado embajador francés ante el Vaticano en 1945, renunció en 1948 para enseñar filosofía en la Universidad de Princeton, donde permaneció hasta su retiro en 1953. Fue prominente en el resurgimiento intelectual católico, con una aguda percepción de la literatura francesa moderna. Aunque Maritain consideraba que la metafísica era central para la civilización y metafísicamente su posición era el tomismo, evaluó completamente las corrientes intelectuales de su tiempo y articuló un tomismo resiliente y vital, aplicando los principios del escolasticismo a los problemas contemporáneos. En 1963, Maritain fue honrado por el mundo literario francés con el Gran Premio Nacional de letras. Se enteró del premio en su retiro en un pequeño monasterio cerca de Toulouse, donde había estado viviendo en retiro ascético durante algunos años. En 1967, la publicación de "El campesino del Garona" perturbó al mundo católico romano francés. En ella, Maritain atacó el "neo-modernismo" que había visto desarrollarse en la iglesia en las últimas décadas, especialmente desde el Segundo Concilio Vaticano. Según Jaroslav Pelikan, escribiendo en el Saturday Review of Literature, "Lamenta que en la teología católica romana de vanguardia hoy no pueda 'leer nada sobre el sacrificio redentor o los méritos de la Pasión'. En su interpretación, toda la tradición cristiana ha identificado la redención con el sacrificio de la cruz. Pero ahora, todo eso está siendo descartado, junto con la idea del infierno, la doctrina de la creación de la nada, las narrativas infantiles de los Evangelios y la creencia en la inmortalidad del alma humana". La esposa de Maritain, Raissa, también se distinguió como autora filosófica y poetisa. El proyecto de publicar las Obras Completas de Jacques y Raissa Maritain está en progreso desde 1982, con siete volúmenes ahora impresos.